miércoles, 19 de marzo de 2014

Regalos

Mañana es mi cumpleaños. En mi casa estos 3 días siempre han sido de fiesta; cumpleaños de mi madre, el día del padre y mi cumpleaños, aunque últimamente no estemos para muchas alegrías y desde hace un par de años no he tenido ganas de celebrar nada, este año sí he hecho algo especial y me he ido a la playa con amigos para celebrarlo por adelantado. Me han regalado un montón de cosas:

Me han regalado 2 días de tranquilidad, momentos de no pensar en nada más que en el presente, me han dado un domingo de no escuchar el pitido de las máquinas a todas horas, noches que no han acabado en llantos y una mañana viendo amanecer en la orilla del mar.



Me han regalado risas, paseos, ganas de seguir adelante, reconocerme a mi misma que necesito ayuda, me han dado tiempo para respirar, sed de bebida sin alcohol, la concha más pequeña de toda la playa
 

baños en agua fría, arena en las zapatillas, ruido de petardos, cenas dentro del coche vigilando las migas. Me han regalado también un fin de semana sano, hambre a las horas de comer, explicaciones sobre aviones, anécdotas del trabajo, desayunar en condiciones en vez de café de máquina, aire fresco sin olor a hospital, fotos sonriendo, cuentos inventados, compras a lo loco, dos días sin pensar en hacer locuras, barbacoas que se queman y olvidarme de pastillas y salas de espera.

Como ellos no sabían que me estaban regalando tantas cosas también me trajeron un juego para beber mate, un par de libros que aún no he comprado y una cámara de fotos. Pero eso, era lo de menos.